¿Por qué un método Holístico?

Nuestro cuerpo es una maquinaria muy compleja.

Con una parte física: huesos, órganos con multitud de funciones y procesos celulares.
Una parte emocional:  las emociones nos hacen mover y tienen repercusión a nivel físico, por ejemplo, el miedo aumenta los niveles de cortisol.
Una parte mental: nuestros pensamientos y creencias afectan a nuestras emociones.
Una parte energética:  nuestros órganos, emociones y pensamientos emiten ondas electromagnéticas de mayor o menor frecuencia.

Todo está conectado.
Cuando todas las partes están equilibradas, podemos hablar de salud, al igual que cuando se altera una parte, influye en todo.

Por lo que cualquier tratamiento es mucho más efectivo si lo abordamos desde todos los niveles: físico, emocional, mental y energético.